- Ropa liviana y cómoda (en verano, durante el día, utilizar indumentaria clara)
- Calzado adecuado (según la actividad)
- Buena hidratación (previa, durante y posterior a la actividad)
- Alimentación: preferiblemente antes de la actividad consumir Hidratos de Carbono, no grasas.
- Descanso adecuado
- Higiene (ducharse luego de realizado el ejercicio)
Guardando estos pequeños, pero muy importantes detalles, sin lugar a dudas vamos a estar mejor predispuestos y realizar la actividad con mayor eficiencia.